Ni con todos los años de mi vida con tu amistad creo que podrían impedir esto. No, no lo sabes por supuesto, y no creo que lo sepas jamás, pero cada momento que paso contigo es especial, y no me gusta nada verte sufrir ni por él, ni por ella ni por cualquier otro. De verdad te mereces tu peso en oro y más y no sé cómo eres capaz de no darte cuenta.
Más sencillo de lo que crees. Créelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario